P.A.S.

“Personas Altamente Sensibles”

Las “Personas Altamente Sensibles” (P.A.S.), se caracterizan por una “mayor sensibilidad sensorial“. Aproximadamente un 20 % de la población tiene este rasgo, que se ha comprobado que tiene un origen genético.

Por otra parte, el Eneatipo 4, que define al Centro Emocional Introvertido, acostumbra a realizar un “procesamiento sensorial más profundo“, a partir de sus emociones. Esto hace del Cuatro una persona muy sensible al entorno.

Cuando hablamos de ambos rasgos estamos hablando de una dificultad a la hora de encajar entre los demás, los que no son tan sensibles, esto es el 80% del resto de la población.

Claro que hay Cuatro que no son P.A.S., y viceversa, pero es muy frecuente que se den las dos circunstancias, lo que resulta en una gran dificultad para lidiar con las emociones.

Una mayor sensibilidad no es más que una “mayor capacidad” para percibir el entorno, esto debería ser una ventaja, o como mínimo una simple diferencia, pero nunca una desventaja.

En muchas sociedades orientales esto está visto con buenos ojos, y es muy frecuente que este tipo de personas ocupen puestos de responsabilidad y de confianza.

Sin embargo, en nuestra cultura es equivalente a una debilidad y, a menudo, se vive como una inferioridad. Y lo que es peor aún, las personas que tienen estos rasgos suelen verse a sí mismas como desafortunadas, como si no pudieran alcanzar una vida satisfactoria como la de los demás.

Por suerte, hoy vivimos un incipiente despertar de la conciencia y, precisamente, son estas personas las que están empezando a cambiar el mundo, tanto en el terreno ecológico, como en la educación, la psicología o la alimentación, por ejemplo.

Es una decisión y una responsabilidad propia empezar a valorarse desde esta diferencia, empezar a dar voz a este 20% que tiene una mayor capacidad de percibir lo que está sucediendo en el mundo, y lo que se necesita para cambiar…